lunes, 12 de septiembre de 2011

ACTIVIDAD 8: Los productos finales de la formación

ACTIVIDAD 7: Reflexionando en torno al mapa curricular del director de escuela.

Instrucciones:

En un trabajo en equipo y con apoyo de las herramientas de comunicación para el trabajo colaborativo trabajen en las siguientes actividades:

a) Analice el siguiente esquema relacionado con la organización de la formación.



o ¿Qué les sugiere el esquema?
o ¿Qué lógica de organización identifican?
o ¿Qué relación encuentran entre cada una de las disciplinas y lo que usted necesita hacer en su escuela? Estas mismas preguntas llevenlas al debate dentro del Sexto Foro de Discusión.

ACTIVIDAD 6: Reflexionando en torno al mapa curricular del director de escuela

Instrucciones: Desde el siguiente formato que se les presenta, retomen rápidamente los seis postulados del texto de Silvia Schmelkes..

Identifique en cada uno de ellos, dos tareas de las más importantes que tendría que realizar para hablar de un liderazgo de calidad y a partir de ellas reconozcan qué conocimientos, habilidades, actitudes y valores necesita para que su desempeño se considere competente. (Anoten las primeras que aparecen en su mente… no lo piense mucho).


ACTIVIDAD 5 Comprendiendo el modelo de formación en alternancia del director de escuela

Den lectura de forma individual al siguiente fragmento que describe las características del modelo de Formación del Director.



Al término a través del Chat u otro proceso de comunicación a través de INTERNET junto con su equipo, discutan sobre los aspectos que les resulten relevantes y en un trabajo colaborativo a través de google docs. revisen el siguiente “esquema de la alternancia” y rescaten los puntos que a continuación se enumeran:
Formación presencial
¿En qué consiste la formación presencial?
En qué espacio se lleva a cabo la formación presencial
¿Cuántas sesiones comprende?
¿Con cuál modalidad de formación mantiene una estrecha vinculación y por qué?
Formación en el contexto
¿En qué consiste la formación en el contexto?
¿Qué características tiene?
¿Qué relación tiene con la formación por competencias?
¿En dónde radica su relevancia?
Tutoría
¿En qué consiste? ¿Quiénes participan? ¿Cuántas tutorías se recibirán? ¿Cuándo y en dónde? ¿Qué relación tiene con la formación por competencias?
Asesoría virtual
¿Qué es? ¿En qué consiste? ¿Quiénes participan? ¿Cuándo se recibirá asesoría? ¿A través de qué medio?
Autoformación
¿Qué es? ¿En qué consiste? ¿Cuándo y para qué se realiza?

Posterior, elaboren una presentación en PREZI en trabajo colaborativo virtual respecto al tema "Características del Modelo de Formación del Director".


PRODUCTO: Presentación en prez.

2. MODELO DE FORMACIÓN DEL DIRECTOR DE EDUCACIÓN BÁSICA

ACTIVIDAD 4 Modelo de formación del director de educación básica

En un trabajo en binas (de acuerdo a empatía con otro director) por medio del blog de discusión 4, reflexionen en torno a la siguiente pregunta:

¿Qué características debiera tener la formación de un director de escuela de educación básica?...

Quien tiene las siguientes condiciones:

+ Que no ha recibido ninguna capacitación específica para desempeñarse como director
* Que realiza la función a partir de su experiencia, estilo personal, intuición y de los modelos que ha tenido.
* Que la sociedad deposita en él la responsabilidad de los resultados educativos que genera la escuela.

Trabajar competencias transversales: Responsabilidad social y Pensamiento analítico

Mencionen tres características que identifique en este momento respecto a su propio proceso. ¿donde se sitúan cada uno como director?..

Tercera actividad: En búsqueda de consenso en torno a la formación por competencias... ¿es una necesidad o una simple moda?

* De lectura al texto titulado: “El concepto de competencia”. Al término del análisis establezca conclusiones de acuerdo a las preguntas planteadas al final de la misma.

EL CONCEPTO DE COMPETENCIA
(Fragmento)
Ministerio de Educación Nacional
Bogotá, Colombia. 2003
Págs.3-5
El concepto de competencia surge de la necesidad de valorar no sólo el conjunto de los conocimientos apropiados (saber) y las habilidades y destrezas (saber hacer) desarrolladas por una persona, sino de apreciar su capacidad de emplearlas para responder a situaciones, resolver problemas y desenvolverse en el mundo. Igualmente, implica una mirada a las condiciones del individuo y disposiciones con las que actúa, es decir, al componente actitudinal y valorativo (saber ser) que incide sobre los resultados de la acción.
La competencia es “un saber hacer frente a una tarea específica, la cual se hace evidente cuando el sujeto entra en contacto con ella. Esta competencia supone conocimientos, saberes y habilidades que emergen en la interacción que se establece entre el individuo y la tarea y que no siempre están de antemano”.1.
Abordar el enfoque de competencias es dar un viraje hacia los resultados de la aplicación de esos saberes, habilidades y destrezas. En otras palabras, las competencias se refieren a un “saber hacer en contexto”. Por ello, la competencia se demuestra a través de los desempeños de una persona, los cuales son observables y medibles y, por tanto, evaluables. “Las competencias se visualizan, actualizan y desarrollan a través de desempeños o realizaciones en los distintos campos de la acción humana. 2
El desarrollo integral de un estudiante debe atender todas sus dimensiones, de ahí que en la actualidad se otorgue especial énfasis a la formación y evaluación de competencias de distinto tipo: básicas (relacionadas con el lenguaje, la matemática y las ciencias), ciudadanas (referidas a la capacidad de actuar en sociedad) y laborales (necesarias para actuar como ser productivo).
La competencia laboral es una pieza central de un enfoque integral de formación que, desde su diseño y operación, conecta el mundo del trabajo y la sociedad con la educación, centrando su atención en el mejoramiento del capital humano como fuente principal de innovación, conocimiento, diferenciación y competitividad.
1) Alcaldía Mayor de Bogotá. Secretaría de Educación (1999). Evaluación de competencias básicas en lenguaje y matemáticas. Secretaría de Educación de Bogotá.
2) Ídem.
3) Alcaldía Mayor de Bogotá. Op. Cit.


Participa en el tercer foro: “El concepto de competencia”.

1. ¿Qué es una competencia?

2. ¿Por qué son tan importantes las competencias hoy en día?

3. ¿Son una moda o una necesidad?

4. ¿Por qué formar al director en competencias?

SEGUNDA ACTIVIDAD: ¿Por qué y para qué estoy aquí?

ACTIVIDAD 2 ¿Por qué y para qué estoy aquí? regresándonos un poco a...

Participe en la lectura de portada de inducción que a continuación se muestra.


Inicie con la introducción y luego con cada uno de los elementos que conforman la sesión 1 de inducción: contenidos, objetivos y competencias transversales.

En seguida pregúntese…

¿Por qué es necesario que participe en este proceso formativo?
¿Los objetivos planteados tienen algo que ver conmigo como director?
¿Qué papel juega la formación de los sujetos en un contexto como el que hoy vivimos?


Comparta sus reflexiones con el grupo a través de comentarios en esta mísma ventana como en la discusión e intercambio de experiencia del segundo foro: ¿Por qué y para qué estoy aquí?

Para trabajar en el Primer Foro de la Inducción.

Instrucciones para el foro.

Participe en EL FORO compartiendo algunos de los conceptos, palabras o ideas relevantes recuperadas y reflexione junto con sus compañeros en torno a las siguientes preguntas:

¿Plantea la lectura algunos retos en relación a la tarea de dirigir una escuela?


¿En los 6 planteamientos que marca la lectura… alguno de ellos alude o remite al concepto de formación? ¿Cuál? ¿Cómo lo identifica? ¿Por qué?


¿Será necesario formar a los sujetos para atender la serie de demandas que la sociedad tiene hacia el director o directora de escuela? ¿Por qué?


De su conclusión-producto de este primer ejercicio de análisis.

PRIMERA ACTIVIDAD: ¿Qué le demanda la sociedad al director (a) de escuela?

ACTIVIDAD 1 Comenzando y reflexionando… ¿Qué le demanda la sociedad al director (a) de escuela?
* A partir de la lectura que a continuación se presenta del texto de Silvia Schmelkes, titulado “La calidad requiere liderazgo”...



Dispóngase con entusiasmo a seguir críticamente la lectura

La calidad requiere liderazgo
Fragmento de Silvia Schmelckes

El director debe ser líder; debe apoyar y estimular

En un proceso de mejoramiento de la calidad, el papel del director es fundamental. Además, y es importante decirlo, se exige de él una función muy diferente de la que usualmente desarrolla el director en las escuelas de nuestros países. La calidad requiere un nuevo tipo de liderazgo, basado en la experiencia y en la convicción personales, y no necesariamente en la escolaridad, edad o rango. Lograr más con el ejemplo de su coherencia vital con los valores que proclama, y con su consistencia, que con la autoridad que procede de su nombramiento.
El director debe ser el primero y el más comprometido con el propósito de mejorar la calidad. Esto significa que el director de una escuela debe sentirse responsable de la calidad educativa de esa escuela. Debe fungir como auténtico líder, capaz de motivar, facilitar, estimular el proceso de mejoramiento de la calidad. En otras palabras, juega un papel de animador de sus colegas y de los padres de familia, es decir, es un animador de la comunidad escolar.
Debe comprometerse e involucrar a su personal en un proceso participativo, constante y permanente para hacer las cosas cada vez mejor. Un director así no puede limitar su función al papeleo administrativo y a las relaciones con el sistema educativo más amplio y con las autoridades de la comunidad. Tiene que conocer a fondo todos los procesos importantes que ocurren en la escuela, y tiene que involucrarse de lleno en cada uno de ellos. A un director no se le puede cerrar ninguna puerta. Tiene que poder reunirse con los maestros, entrar al aula, conversar con los padres de familia, entender los problemas de los alumnos. Más importante aún, le corresponde a él la difícil tarea de ser el motor principal de un proceso mediante el cual la escuela logre niveles de resultados cada vez mejores y cada vez más acordes con las necesidades de sus beneficiarios. Como ya hemos señalado varias veces, este proceso requiere constancia. Del director depende esta constancia.
Para la filosofía de la calidad, la clave consiste en que los directores entiendan que ellos son el problema. No porque no actúen o se desempeñen como se espera que lo hagan, sino porque no asuman las funciones que acabamos de describir. Si no hay nadie que las asuma, no puede darse un proceso de mejoramiento de la calidad. Y quien las asume debe ser el director. La calidad comienza con una idea, con un plan, que es establecido por el director.
El director debe ser capaz de desarrollar un plan, explicárselo a los maestros, entusiasmarlos para que ayuden a realizarlo, y al mismo tiempo mantener una presión coherente y constante sobre la escuela para que el plan se lleve a cabo. El móvil fundamental del director, más que de ningún otro miembro del personal, es satisfacer cada vez mejor las necesidades de los beneficiarios de la escuela. (…).

El director debe buscar que el docente esté orgulloso de su trabajo


El director se preocupa por eliminar las barreras que privan al trabajador (al docente) de su mayor derecho: el derecho de estar orgulloso de su trabajo (…). Este es uno de los elementos fundamentales de la filosofía de la calidad. El líder de un proceso de calidad debe ayudar a los docentes a trabajar más inteligentemente, no más duramente. (…).
El líder, en vez de ser un juez que inspecciona y evalúa a las personas, es un compañero que aconseja y dirige a su gente día con día, aprendiendo de ellos y con ellos. El objeto del liderazgo es mejorar el comportamiento del ser humano para mejorar la calidad, (…).

Un director se preocupa por investigar


(…) hemos procurado dejar claro que no se puede planear mejorar la calidad de la escuela a partir de intuiciones. Es necesario contar con información sólida e interpretarla correctamente. Esto significa que hay que conocer nuestra escuela y nuestro entorno. Tenemos que conocer en primer lugar, cómo estamos logrando nuestros objetivos hacia fuera: qué niveles de aprendizaje estamos logrando. Tenemos que conocer las condiciones y las necesidades de nuestros beneficiarios –de todos ellos- y la forma en que estamos fallando en su satisfacción. Pero también debemos saber con qué recursos contamos, quiénes somos como equipo, qué nos falta para enfrentar el reto de mejorar nuestros niveles de logro. Tenemos que poder investigar las posibles soluciones a los problemas que detectamos. Y tenemos que ser capaces de monitorear el proceso de solución y de evaluar sus resultados. (…)
Todos estos son procesos que requieren de investigación. Esta investigación no tiene necesariamente que ser compleja. Una prueba sencilla a los alumnos; una entrevista a fondo del director con cada uno de sus docentes; un conjunto de visitas a los padres de familia; (…). Un proceso de mejoramiento de la calidad implica hacer todo esto para contar con información de la realidad que nos permita interpretar, encontrar causas y diseñar soluciones. Es un paso indispensable para poder elaborar un plan en el que nos involucremos todos. El director tiene que ser capaz de idear y de conducir estos procesos de investigación.

Un director se preocupa por la formación en el trabajo


El proceso de mejoramiento de la calidad es un proceso que educa continuamente a quienes en él se involucran. Participar en un proceso de esta naturaleza implica aprender a conocer las necesidades del beneficiario: de los alumnos, de los padres, de la comunidad y, en último término, de la sociedad actual y futura. Significa aprender, en el proceso mismo, a investigar, a interpretar la información, a discernir las causas principales de un problema. Involucrarse en un trabajo de mejoramiento de la calidad significa aprender de los colegas que ya han intentado solucionar un problema, conocer otras experiencias, (…) Implica aprender a traducir una idea en un plan con metas a corto y mediano plazos, que puede ser llevado a la práctica y que pueda ser evaluado. Significa aprender a medir, a monitorear, a evaluar, lo que significa también desarrollar la capacidad de crítica y autocrítica, y la creatividad.

Pero quizás, y sobre todo, participar en un proceso de esta naturaleza implica aprender a vivir valores nuevos: el valor de la insatisfacción constante; el valor de querer hacer el trabajo siempre mejor; el valor de la solidaridad; el valor de poner el objetivo externo, por encima de los intereses personales; el valor de perder el miedo a expresarse, a criticar y a equivocarse; el valor de humildad que se manifiesta en la disposición y apertura a aprender de los demás. Participar en un proceso de mejoramiento de la calidad. Es participar en un proceso profundamente educativo. Al director le corresponde impulsar, facilitar y estimular que este proceso se dé. (…)

El director tiene dos responsabilidades: mantener y mejorar


La responsabilidad de mantenimiento del sistema se refiere a la necesidad de asegurar que todos puedan alcanzar los estándares establecidos en un determinado momento dentro del ciclo de mejoramiento de la calidad –comenzando por el momento inicial-. Para ello, es necesario que el director formule, con el apoyo de sus colegas procedimientos, reglas y directivas claros, de manera que no haya dudas acerca del procedimiento establecido para lograr los actuales niveles de resultados (…). Después de un ciclo de mejoramiento de la calidad, alcanzados nuevos estándares de logro, es necesario volver a precisar, con toda claridad, los nuevos mínimos de comportamiento esperado para mantenerlos. (…).
La responsabilidad del mejoramiento es la otra cara de la moneda. Se refiere a la necesidad de dar los pasos necesarios para ir logrando estándares de comportamiento y niveles de logro cada vez más altos. La teoría de la calidad total en administración estima que un director debe dedicar la mitad de su tiempo a la responsabilidad del mejoramiento.

El director tiene dos funciones: la función estimulante y de apoyo y la función de contro
l

La primera de estas funciones, la estimulante y de apoyo, está dirigida a los procesos. Consiste en propiciar que mejoren las relaciones de manera que puedan producirse buenos resultados. La segunda de estas funciones, la de control, está dirigida a los resultados. En un movimiento hacia la calidad, la primera es la función en la que se hace énfasis bajo el supuesto de que, si los procesos mejoran, mejorarán los resultados. Sin embargo, esto no significa que se descuide el control de los resultados. De hecho, el control sobre los resultados –sobre el logro de mejores niveles de aprendizaje en más alumnos- es la forma de evaluar si el mejoramiento de los procesos fue efectivo.
Así un director necesita administrar tanto los procesos como los resultados (…).


- Será el punto de partida para comenzar un diálogo interno y personal, en torno a lo que la sociedad demanda de un director o directora de escuela de educación básica.

¿Se ha preguntado cuál es su principal labor como director de una escuela de educación básica?
¿Hasta dónde es su compromiso y responsabilidad de dirigir un plantel de educación básica?
¿tiene o no claro el camino como sus responsabilidades como director de una escuela de educación básica?


- Rescate las ideas básicas de la lectura empleando el formato que se le sugiere para recuperar los aspectos relevantes de ésta.


Introducción

1. MODELO DE FORMACIÓN POR COMPETENCIAS

Introducción
En la sociedad actual se están viviendo cambios sustanciales que demandan y exigen a todas las instituciones tanto públicas como privadas nuevas formas de organización y de relación entre los diversos protagonistas sociales; el Estado, la empresa, los ciudadanos, los trabajadores, y en especial a los educadores; en virtud de que dichos cambios nos permiten advertir escenarios de retos y oportunidad, como lo es, por ejemplo el uso de la tecnología y la comunicación; pero también de incertidumbre, confrontación y ajustes en las formas de ser, de pensar y de actuar, tal es el caso de los valores, las expectativas laborales y de bienestar social e individual. Es decir, podríamos afirmar que nos encontramos ante una serie de dilemas y frente a un nuevo paradigma.
En este contexto, la formación del capital humano de cualquier institución, representa una de las rutas más viables e inteligentes para responder a la serie de oportunidades y amenazas que trae consigo dichos escenarios de cambio, más aún cuando se trata de formar a las y los directores de instituciones educativas de educación básica, pues en ellos, la sociedad en su conjunto deposita sus aspiraciones y demandas para lograr que la escuela sea el punto de encuentro y convergencia de alumnos, alumnas, maestros y maestras, de padres y madres de familia y de toda la comunidad escolar para la innovación y la transformación social.
Hoy la Secretaria de Educación Jalisco, reconoce que la sola formación inicial como profesor de grupo y el ascenso al puesto de manera escalafonaria, no son suficientes, para que las y los directores cuenten con el perfil idóneo y las competencias necesarias en el desempeño de su función. Por lo tanto, asume que para ejercer con mayor éxito, dicho rol, es indispensable formarlo en un conjunto de conocimientos, habilidades, actitudes y valores que le permitan al director, por un lado, enfrentar de mejor manera las demandas que la sociedad exige en términos de calidad en torno a los aprendizajes de las y los alumnos; y por otro, asumir como servidor público la responsabilidad de los resultados que la escuela genera.
Por todo ello, la Secretaría de Educación Jalisco, instrumenta a partir del ciclo escolar 2007-2008, el Programa de Formación de Directivos por Competencias, acción estratégica a mediano y largo plazo, que tiene como propósito fundamental, transformar la gestión educativa, a través de la profesionalización del director de educación básica y asegurar con ello, que las escuelas se consoliden en comunidades permanentes de aprendizaje, garantizando una educación de calidad, con equidad para todos los niños, niñas y jóvenes de Jalisco1.
Uno de los aciertos del Programa de Formación de Directivos por Competencias para alcanzar su objetivo, es la incorporación de un equipo sólido y altamente competente de formadores, cuya tarea esencial es coadyuvar en la profesionalización de los directores de educación básica, a través de la puesta en juego de sus conocimientos, habilidades, actitudes y valores, para que a su vez propicie en usted, la adquisición de las competencias que le permitirán transformar la gestión, la escuela y la Educación en Jalisco.
Durante esta sesión, considerada de “Inducción al Modelo de Formación por Competencias”, se prevé que los formadores lo inviten a realizar un recorrido alrededor del concepto de competencias… ¿Qué es? ¿De dónde y cómo surge? También se analizará y discutirá sobre el por qué en la actualidad los sujetos deben formarse en competencias. Más tarde la intención es problematizarlo en torno al por qué y para qué formar al director de
escuela de educación básica en competencias, considerando como referente para el análisis, el texto de Silvia Schmelkes, titulado”La calidad requiere liderazgo”.
El trabajo de la sesión finalmente aterriza en una serie de ejercicios y dinámicas que ayudarán a que usted desarrolle un alto nivel de claridad y comprensión en torno al modelo de formación por competencias; su esquema de organización, el mapa curricular, el sistema de evaluación, etc., modelo, que por cierto, vale la pena resaltar, fue confeccionado a la medida de las necesidades y características de usted, por un equipo de profesoras y profesores de la Secretaría de Educación Jalisco, lo cual nos ubica como un estado pionero e innovador.
Por todo ello, lo invitamos a que disfrute, comparta, aprenda, dialogue y capitalice esta experiencia que es única y que será de enorme utilidad para su desempeño como profesional de la educación, pero por supuesto, como persona. ¡Comprométase íntegramente en esta aventura!
¡Bienvenido (a)! Usted es el principal actor en este proceso formativo